martes, junio 27, 2006

Excomunión.

Palermitanos:

Duro fue el camino a recorrer anoche, cuando sudorosos y sedientos hubimos de emprender el árido sendero que nos devuelve, lentamente, al calor de nuestros hogares.
Así fue que pocos legionarios, ante la deserción de Nani, Hernán , Rolo, Pelado, -Edu, más los viajeros, Porel, Mr. President, Uru, o el auto exilado Pesca….por ejemplo….atravesamos las oscuras tenebrosidades nocturnas, en busca de algún refugio, alguna ermita, algún santuario, un “pied a terre” donde calmar la sed, donde reponer algo de sus exhaustas fuerzas. Ni siquiera contábamos con la reaseguradota presencia del Cardenal, para sofrenar tanta incuria espiritual.
La dura sentencia recayó sobre tirios y troyanos, sin mediar posibilidad de defensa o descargo. Tristán, nuestro liason officier… discurrió largos circunloquios celutelefónicos, más la decisión fue lapidaria. E inapelable. Hemos sido expatriados. Expulsados. Ex comulgados.
No hay peor castigo.
NI siquiera la hoguera es tan cruel, pues en ella se expía el alma. No. El exilio es peor.
Condenados a errar, como el holandés sin rumbo, como el judío sin nombre, como el eternauta, como Jackaroe, como Nippur de Lagash, condenado por siempre a no retornar a Ur…!!!! Como Kokito, en busca de un PIluso… que ya no está…..

Sombrío el gesto, la diezmada y melancólica escuadrilla, apenas podía repasar la anecdótica justa deportiva previa.
Siquiera el pasar, una breve mención, lacónica por demás, sobre cierta novel y blonda presencia en las huestes voleivolísticas.

Fiel a sus convicciones, y sin dejar que los traspieses que le amargaron el alma interfirieran en el cumplimiento de sus diplomáticos cometidos, El Tigre rápidamente gestionó asilo, que fue garantizado gracias a los buenos oficios de Sherman, que acogió a los torvos peregrinos.
Así refugiados en escuálida mesa Dorital, cansina la mirada, con el regusto amargo de la injusticia y la sinrazón, apuramos algunos magros bocadillos (de acelga, para ser más precisos), y alguna que otra viande rouge para reponer contenido proteico.
Comunicamos la sanción extraterritorialmente, por via de exhorto nextelefonico a un Guille autoacuartelado en oscuros aguantaderos brasuqueños.
Quien les habla, apenas pudo saborear unas pocas gotas de cierto Cabernet, con la certeza de haber sido perseguido y condenado.. por un crimen que jamás cometió.
Soñe anoche una frenética persecución en búsqueda de un siniestro personaje, que, manco él, insultaba camareros gays, sobaba sus mocos en los brazos de las señoritas, y eructaba sonoramente, mientras preguntaba si conocía el chiste del mago…!
El sueño se interrumpió cuando sonó el teléfono… desde lo más profundo de mis sombras, una voz me espetó… “le encontraré Dr. Dasso!!!!!!!”…..

No hay comentarios.: